En un contexto de mayor presión normativa y operaciones corporativas en auge, la auditoría laboral interna se ha convertido en un instrumento esencial para empresas del middle market.
No se trata solo de evitar multas: se trata de proteger el valor empresarial, mejorar procesos y reforzar la confianza de inversores o compradores.
Es una revisión integral de los aspectos laborales y de personal de una empresa, con el objetivo de detectar incumplimientos legales, riesgos y oportunidades de mejora.
Esta auditoría puede tener dos objetivos:
En 2025, la Inspección de Trabajo y Seguridad Social (ITSS) está centrada en:
Una auditoría permite:
Ejemplo real: Una pyme con 75 empleados evitó una multa de 18.000 € tras detectar y regularizar 10 contratos temporales mal redactados y actualizar su registro horario.
En procesos de compraventa empresarial, el comprador revisará el área laboral con lupa. Si encuentra contingencias:
Una auditoría previa permite:
1. Contratación
2. Nóminas y Seguridad Social
3. Jornada laboral
4. Políticas internas y cumplimiento
5. Litigios y expediente disciplinario
¿Cuándo se recomienda una auditoría laboral?
Al menos una vez al año, y siempre antes de una compraventa, fusión o entrada de socios.
¿Cuánto tiempo lleva una auditoría laboral?
Depende del tamaño de la plantilla y documentación, pero suele completarse en 2 a 4 semanas.
¿Qué pasa si se detectan irregularidades?
Nuestro equipo propone un plan correctivo inmediato y legalmente seguro, sin afectar la actividad normal de la empresa.
¿Y si quiero vender mi empresa?
La auditoría permite maximizar el precio, reducir el riesgo de contingencias y mejorar su posición en la negociación.
¿Necesita asesoramiento? Acceda a nuestra área relacionada con la auditoría laboral interna: